Proyecto ‘Allí mis pequeños ojos’: Instantáneas de la vida cotidiana

Instantáneas de la vida cotidiana, perpetuadas por el ojo del fotógrafo. Lo real -inaprensible- se revela ficción. Lo invisible -esencial- se aprecia merced a la imaginación. Lo nimio, lo banal, lo superfluo... todo ello cobra valía cuando hay asombro. Tomas directas. Espontáneas. Vívidas. Una colección de estampas en blanco y negro, que colorean un tiempo y un espacio. El voyeur presta su mirada al auteur. El deambular, si es atento, se cobra imágenes bellas, memoriosas, memorables; de esas que encapsulan gracia, ironía, sensibilidad y ternura. Por supuesto: el ahora se hace siempre. Y sí -dígase de este modo-, la efimerez hace a la eternitud.

Amateur

No soy profesional, pero amo la fotografía, vivo de ella, es aire que respiro.

Trabajo cuando estoy dedicado al papeleo, a las facturas, a los asuntos de oficina, pero no cuando hago fotos. Hay un término en español que me gusta mucho. Al llegar a vivir a Almería un asesor fiscal me dijo: “Un trabajo como el suyo se llama ‘fotógrafo de aire libre’”
— Bernad Plossu

Ésa es exactamente mi condición.

¿Fotografía callejera?

Prefiero llamarla fotografía de vida cotidiana.

Nada más pisar la calle, comienza el aprendizaje de lo inesperado
— Antonio Muñoz Molina
Cada mañana, el telón se alza en el teatro de lo cotidiano
— Agnès Varda

Mis pequeños ojos

Me gusta creer que la mía es la mirada de un niño. A veces pícara, desvergonzada, ingenua, inmadura. También perpleja, carente de certezas, sorprendida. Por momentos afectuosa, plena de cariño, de ternura. ‘Ternura’ es una palabra que no abunda en el glosario de la Fotografía Contemporánea.

Veo a niños que pintan de maravilla y luego, en la pubertad, se acabó, abajo el telón. Cuando ya has aprendido cómo se hace, necesitas toda una vida para rescatar, no ya la pureza infantil, pues eso no se recupera, sino las cualidades del niño
— Henri Cartier-Bresson
Todo el mundo va disfrazado / para esconder lo que hay detrás de sus miradas / pero yo no puedo disimular cómo soy / donde quiera que los niños vayan, los seguiré
— Bob Dylan, Abandoned Love

El acto fotográfico

Lo que importa es la mirada. Privilegiar el momento de observar, vibrar, obturar la cámara, no las imágenes resultantes.

La mayoría de las buenas fotografías, en particular aquéllas que son rápidas y están llenas de lirismo, son batallas entre el artista y la suerte, y las victorias más dichosas para el artista son los empates
— James Agee

¿Conflictos al fotografiar en la calle?

Algunas veces, sí. ¿Una recomendación? Manejarse de igual modo que en la vida, con respeto, deferencia y cortesía. Ser fotógrafo no es diferente a ser humano.

La mayoría de mis fotografías es de gente, vista de un modo muy simple, como a través de los ojos del hombre de la calle. Hay algo que la fotografía debe contener: la humanidad del momento
— Robert Frank

¿Ver o mirar?

Ver es, simplemente, ejercitar un sentido, el de la vista. Algo que todos hacemos de manera parecida, siempre y cuando no suframos alguna discapacidad visual importante.

Mirar, en cambio, es una acción más única, rica y compleja.

Mirar quizás sea un verbo que incluya a otros verbos: sentir, desear, pensar, querer, amar...

Ver es algo que nos implica a todos. Mirar nos involucra a cada uno. Y 'todos' no es lo mismo que 'cada uno'. Ni siquiera el 'todos' es la suma de los 'cada uno'. Por suerte todos vemos lo mismo, pero por fortuna cada uno miramos distinto.

Vemos sólo lo visible. Miramos también lo invisible.

El mirar construye miradas. Y ese es el único patrimonio de los fotógrafos: su mirada.

Definitivamente la fotografía es cuestión de mirar. No de ver, de mirar.

No soy ni pensador ni escritor, soy mirador
— Ramón Gómez de la Serna

¿Por qué cámara analógica?

Por amor a la imagen latente. Allí habitan, juntos, el misterio de la obturación y la magia de lo secreto, lo escondido. ¿Qué es eso? Una ensoñación intangible pero perdurable, cuando una fotografía (aún sin revelar) sólo yace grabada en nuestras retinas, nuestra mente y nuestro corazón.

La perplejidad es el secreto del laberinto
— Jorge Luis Borges

¿Es la fotografía un arte o un documento?

Mis fotografías no declaman méritos artísticos, ni proclaman logros documentales. Son imágenes. Frutos -en parte- de la imaginación mía. Hijas -con virtudes y defectos- de mi mirada.

Ni artística ni documental, pienso mi fotografía como un acto amoroso, de relacionamiento con un entorno en el que crezco, me reconozco, y al que me gustaría legarle mi impronta.

De Henri Cartier-Bresson aprendí muchas cosas. En un documental se lo ve salir -de a ratos- a obturar sin película en la cámara. ‘Hace fotos’ (entre comillas) que nunca existirán. Cuando lo vi pensé que bromeaba, con el tiempo vislumbré algo importante en aquel hecho ‘disparatado’. Cada tanto lo emulo, ando por la vida con cámara (analógica) sin rollo, y miro; miro y obturo, obturo y vibro, vibro y respiro, respiro y vivo.

Abrir los ojos para ver lo cotidiano de otra manera, mantener la ingenuidad de la mirada, para cuestionar lo banal, y descubrir secretos
— Pina Bausch

Exposición en España

Allí mis pequeños ojos se expone actualmente en España, en Tres-e-u - VicClic Espai Fotogràfic, en Vic (Barcelona) hasta el 14 de mayo, de lunes a viernes, de 17 a 20 h.

Guillermo Franco

Guillermo Franco (Argentina, 1967). Estudió Ciencias de la Comunicación en la Universidad Nacional de Córdoba, y Fotografía en la Escuela de Artes Aplicadas Lino Enea Spilimbergo, y en la Filial Córdoba de la Escuela Argentina de Fotografía. Es uno de los fundadores (y el programador de su Sala Mayor desde 2000 hasta el presente) del Cineclub Municipal Hugo del Carril, también redactor/editor de sus revistas Metrópolis y ¡Dime que me amas, Cineclub! Dictó -desde 2006 y hasta 2020- el Taller de Cine para Adultos “El cine que no vemos y nos debemos” en AulaUniversitaria (Programa para Adultos Mayores) de Universidad Blas Pascal. Coordinó -desde 2012 y hasta 2020- el ciclo “Cine y Fotografía” en el CEF (Centro de Estudios Fotográficos). En 2021 inauguró GF / Galería Fotográfica (Independencia 180, Córdoba, Argentina), espacio donde han exhibido sus obras, entre otros, Natalia Roca, Dulce Delía, Gabiota San Martín, Adolfo Rovelli, Rogelio Berardo, Carles Canals Masats, Maxi Vernazza y Juan Travnik. En 2023 presentó ALLÍ MIS PEQUEÑOS OJOS (libro publicado por editorial Viento de Fondo). En 2023 presentó, también, LA IMAGEN MUESTRA LO QUE FALTA, LA PALABRA NOMBRA LO QUE FUE (Retratos hechos en estudios de Córdoba, desde finales del Siglo XIX hasta mediados del Siglo XX. Colección de la Galería Fotográfica). Es autor de las nubografías que llevan por título SOBRE NOSOTROS SOLO EL CIELO.

CON TODAS LAS ILUSIONES DE MI VIDA REAL (2024) es su segunda exposición fotográfica, luego de ALLÍ MIS PEQUEÑOS OJOS (2015).

https://www.instagram.com/gfgaleriafotografica/
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Am I Me Through Geography? (una reflexión sobre comisariar una exposición colectiva)